ILUSTRACIÓN CIENTÍFICA Y PALEOILUSTRACIÓN

Desde pequeño siempre me han apasionado la naturaleza, dibujo y la pintura. Nunca he podido dejar de pintar y cuando llegó el momento de decidir qué camino académico tomar mi mitad de naturalista resulto tener más hambre y acabé estudiando Biología. Desde entonces uno de mis planes de futuro ha sido compajinar mis dos pasiones dedicándome a la Ilustración Científica.


Imagen de microscopio óptico del gimnoblástido Tubularia. Dibujo a tinta china coloreado digitalmente
Comparación de los dos grandes grupos de simios, los Platirrhini y los Catarrhini.


Aquí encontrareis una galería con más trabajos de ilustración científica.


Dentro de esta disciplina hay una especialidad que tiene grandes posibilidades: la Paleoilustración. Desde mi punto de vista la paleoilustración es la máxima expresión de ilustración científica por varios motivos:

  • No puede ser sustituida por la fotografía, que ha acabado con las ilustraciones tradicionales, ya que no pueden fotografiarse las especies fósiles.
  • Es un proceso puro de creación y de síntesis de información, ya que se puede diseñar la imagen en todos sus componentes para que cumplan un objetivo concreto.
  • Los organismos fósiles en general, y los Dinosaurios en particular, despiertan un interés grande en el publico general.
  • Se trabaja con organismos espectaculares y apasionantes.

Mis primeras reconstrucciones paleontológicas serias las realice para el proyecto de una enciclopedia, que nunca llegó a publicarse, en 2002.

Siempre ando investigando nuevas técnicas que me ofrezcan alternativas útiles y adecuadas a cada proyecto. En el caso de la paleoilustración, el uso de medios digitales supuso una ventaja definitiva. Yo no trabajo en 3D. Simplemente empleo las herramientas digitales para trabajar como lo haría con los medios tradicionales (tradigital lo llaman por ahí yo prefiero pintura digital a secas). La pintura digital permite muchas libertades. Una de las más importantes es que te permite corregir, ajustar, redibujar, probar y arriesgar sin temor de echar a perder todo el trabajo. Esto permite tantear continuamente en la imagen (con efectos de luz, color, etc) hasta encontrar lo que uno busca. Además al no tener las limitaciones de tiempos de secado y de formatos grandes, se puede trabajar mucho más rápido. Y por lo tanto se aprende y se evoluciona más rápido.

Hylaeosaurus armatus, Pintura digital 2009. Tercer premio del I Concurso Internacional de Ilustración Científica de Dinosaurios de Salas de los Infantes.


Dos dromeosauridos dormitando a la sombra de una cicada, Pintura digital 2010. Primer premio del II Concurso Internacional de Ilustración Científica de Dinosaurios de Salas de los Infantes.


Las dos imágenes premiadas de arriba se incluiyen en la exposición itinerante Dinosaurios en el lienzo: imágenes de un mundo perdido, que actualmente se encuentra en la Casa de la Ciencia de Logroño. Para más información pincha aquí.

Poster explicativo del fenómeno de enanismo insular en ornitópodos evidenciado por restos hallados en Arén, Huesca. Pintura digital 2010.


Reconstrucción del therizinosaurido Nothronychus. Pintura digital 2010



Gracias a la experiencia adquirida en los trabajos digitales, puede mejorarse también la calidad de los trabajos tradicionales.


Un Protosuchus carroñea sobre el cadaver de un ornitópodo primitivo. Grafito sobre papel 2010